martes, 16 de abril de 2019

Regalo de Dios.

Este instante es el eslabón  para la conexión con tu divinidad o realidad de ser en si misma.
Date cuenta que quien nada necesita se le confía todas las cosas.
Este instante no necesita nada, se alza como la sede e invita a la confianza de todo.
Dónde todo lo puedes entregar con seguridad, y ello permite que te alces con él en certeza y confianza, ya que sabes que él no está en estado  de necesidad de apoderarse de nada.

Qué miedo!! entregar todas tus ideas de tu vida, de tí y de  todo lo que te rodea, a este humilde regalo que se te ofrece para que la verdad sea presenciada.

Tal vez sientas miedo de entregar a algo que parece  tan "vacío", tu gran preciado tesoro, tu pensamiento de ti.
Esa idea  que defiendes con gran ímpetu, con enormes murallas ilusorias, en las que hay inscrito "yo soy así" por todo lo que he  pasado.

Pero que nunca existió.

Tú ilusión de  creer ser algo temporal, algo que percibes como real, te lleva a dar el permiso a que el miedo sea invitado, cuando un destello de realidad aparece atravesando hasta  la luz que hay tras todos esos ficticios conceptos   en los que te depositas para ser identificado.

Un regalo sin descripción, ya que nunca fue vivido, nunca fue encontrado y nunca lo encontrarás.
Tan solo es.
¡¡Observa!!
¡¡Ahora!! Date cuenta que en este instante hay  una nueva ofrenda de Dios.

J.LL.

 

jueves, 11 de abril de 2019

EN DESTELLOS DE REALIDAD

El permiso es la sede en el que los destellos de la realidad aparecen , a los que llamas milagros.

Un milagro es simplemente un destello de lo que realmente es o eres.
De ahí, que los milagros no hacen, sino deshacen, para reconocer lo que siempre ha sido.

Lo que no das para ser compartido y dices que amas, ten por seguro que no recibirás.
Si no hay una dádiva de ser compartido lo que proclamas que amas, ten seguro que no se te dará.